Hodelpa Nicolás de Ovando

Intercalado entre el agua brillante del mar Caribe y la calle de adoquines más antigua del nuevo mundo, el Hodelpa Nicolás de Ovando es una joya colonial. Este histórico hotel está situado en tres residencias de piedra que parecen castillos construidos en 1502, incluyendo la casa original del fundador de la ciudad, el gobernador Nicolás de Ovando. Con sus paredes y almenas impregnadas de historia que miran hacia los cursos de agua, este es un sueño hecho realidad para cualquiera que desee explorar Santo Domingo fuera del bullicio.

Cada una de las casi cien habitaciones de huéspedes (y cuatro suites VIP) está lujosamente restaurada para mostrar el rico patrimonio colonial español del hotel. Los lujos de cinco estrellas se han integrado cuidadosamente para preservar el ambiente histórico. Tómate un tiempo para recorrer los pasillos y almenas de piedra elegantemente amueblados, disfruta de la vista de los barcos que serpentean por el Rio Ozama y sumérgete en cinco siglos de intriga colonial caribeña.

El desayuno se sirve en la terraza colonial española con vista al distrito colonial. El amable personal dispone un buffet con pan artesanal horneado en el lugar, frutas frescas, tortillas, pasteles franceses, opciones de pescado salado de inspiración nórdica, junto con batidos, jugos verdes y, por supuesto - un delicioso café dominicano.

Si estás buscando ejemplos exquisitos de auténtica cocina dominicana, no es necesario salir del hotel. En el Patio Bartolomé de las Casas, el Restaurante 1502 ofrece especialidades latinas tentadoras como sancocho, churrasco y pinchos, junto con coñac añejo y vinos finos. De lo contrario, dirígete al bar del hotel para probar el plato local mofongo, o pasa por el distrito colonial para disfrutar de tacos y tequila en Onno's. Para un postre dulce, dirígete a Paletas Bajo Cero para disfrutar de helado gourmet hecho a mano.

Abierto de 8 a.m. a 11 p.m., el bar del hotel "La Taberna del Mojito" se especializa en mojitos. Puedes relajarte en el lujoso lobby colonial, protegerte en la galería o mojar tus dedos en la piscina al aire libre, rodeada por fachadas coloniales y abierta a un cielo azul abovedado.

Para disfrutar de tapas de clase mundial, cocteles, cigarros y jazz en vivo, dirígete al zona colonial y sigue la multitud fabulosa después del trabajo hasta Lulú.

Este edificio colonial listado en la UNESCO esconde una piscina al aire libre, una mesa de billar, un centro de fitness, servicio de lavandería, conserjería y servicio de aparcacoches.

Desde el siglo 1500, la histórica zona colonial es la primera colonia europea existente en las Américas y tiene el estatus de Patrimonio Mundial de la UNESCO. Durante el día, la zona colonial es uno de los principales atractivos de Santo Domingo, con varios puntos turísticos que merecen ser visitados, incluyendo el Alcázar de Colón, la Fortaleza Ozama y la Basílica Catedral de Santa María la Menor. Por la noche, la zona está llena de animados bares cosmopolitas y atrae a una elegante multitud de locales y visitantes vestidos para la cena y los cócteles.

Aunque hay casi cien habitaciones, este es uno de los hoteles más prestigiosos de Santo Domingo, por lo que querrás reservar con anticipación para asegurarte de obtener la habitación que prefieras.